Reseña: “Cómo acercarse a… La poesía”

 

Portada

Portada del libro en su versión de distribución gratuita en México.

A lo largo de mi formación académica siempre me he interesado por la poesía, y no es para más, porque yo escribo y leo poesía, he encontrado inspiración en cosas cotidianas, tan pero tan cotidianas que te asombrarías de saberlo, cotidiano como la forma en la que me encontré esta maravillosa obra de Ethel Krauze, caminaba yo por la biblioteca escolar con la única razón de asistir a que me tomaran una fotografía para asuntos académicos cuando, de pronto, miré hacia la estantería y vi el título: “La poesía, Ethel Krauze”… me atrapó; no dudé ni un instante en tomarlo, tardé más en que me fotografiaran que en tomar el libro y registrarme, y así inició la lectura del mejor libro que he leído en mi vida, una obra que te dejará los pelos de punta y con unas ganas tremendas por comenzar a escribir, lo que sea, o lo que sientas.

Ethel logra plasmar en este libro una maravillosa historia, nos relata partes de su infancia y pubertad enseñándonos cómo se acercó ella a la poesía, en 2 partes, y éstas a la vez subdivididas en 3 y 4(una de estas cuenta con otra subdivisión con otras 2 secciones) .
La sección 1 no es más que el prólogo, en el que Ethel nos deja claro ese amor que le tiene a la poesía, a detenerse de la nada en la calle y escribir algunos versos, a la literatura; nos deja claro también que este no es un manual de poesía, que no pretende enseñar recursos prosódicos, sino fomentar ese amor a la poesía que ella nos demuestra en el libro.

Es aquí donde comienza la parte narrativa del libro, Ethel nos cuenta en su infancia y en su cotidianidad cómo se acercó a la poesía; su casa… llena de libros la orillaron a leer, y así, descubrir en la Rima XXI de Bécquer su primer definición de poesía.

¿Qué es poesía?, dices, mientras clavas
en mi pupila tu pupila azul,
¡Qué es poesía! ¿Y tú me lo preguntas?
Poesía… eres tú.

Gustavo Adolfo Bécquer

Entre día y día escolar Ethel conoce a un muchacho, del cual se enamora, y con el cual llega a un romance, que sólo termina en chismes alemanes y un padre enfurecido con la vecina, por decir tantas calumnias de su amada hija, Ethel; pero ella sabe que todo lo que la alemana dice es verdad, así que después de alejarse de él, se encierra en su cuarto a escribir; él nunca vuelve y ella nunca lo olvidará.
Y así, sabiendo sus padres sobre su amorío secreto, es como la madre de Ethel descubre que su hijita escribe poesía, ‘¡Esto es poesía!”; entonces, comienza una parte muy importante de la historia, donde Ethel es instruida por ‘El Maestro’, que como Ethel nos lo ofrece, es un viejo solitario, poeta y amante de la literatura, quien le dice: “Escribe lo que traes adentro…”.
Y con enorme alegría Ethel descubre un día un concurso de poesía, aunque para el bachillerato de su colegio, consigue ingresar, entonces, con una selección de sus 5 mejores poemas descubre lo duro que es trabajar con El Maestro.
Esta etapa termina con una ligera explicación de lo que son (o eran) sus talleres de poesía, y un magnífico discurso, el cual, en lo personal, me dejó sin palabras, sólo basta leerlo para sentirse en el paraíso, el paraíso de la poesía.

Y detrás de un Índice Bibliográfico se esconde la segunda parte de la obra; un mar de citas de personajes famosos o no que se expresan de la poesía (poéticamente o no), definiciones de arte, literatura, poesía y demás se esconden en un par de páginas, que dan paso a otra sección: Bibliografía (de las citas).
Entonces comienza una parte muy conmovedora, pues entre testimonios de personas como nosotros mismos encontramos a la poesía, y buscamos entre testimonios aquel que concuerde con nuestra experiencia poética, aquel que describa cómo nosotros nos acercamos a la poesía; “Libros en mi casa”, “Un pedazo de periódico con algún poema en la calle”, “En la escuela leí un poema”, “La narrativa me impulsó a la poesía”, y así podríamos durar horas, entre testimonios y experiencias encuentras a la poesía, a ti mismo, y a ese amor prohibido, o tu primer amor, o tu primer poema tal vez… no importa, porque encuentras tu mayor acercamiento a la poesía.

Y llega mi parte favorita, una antología con poemas al azar, todos, hechos para que tú sientas ese algo cuando los leas; desde García Lorca a Octavio Paz, y unos cuantos Haikús Japoneses; Castilla de Manuel Machado nos atrapa en su ciego sol, con los terribles golpes que la vida caritativamente nos ofrece. Es aquí donde el libro termina, y te preguntas qué será de tu vida sin él, o qué sería de ella si lo lees, yo, como lector y escritor, te invito a que leas esta magnífica obra de Ethel Krauze, porque ella plasmó en este libro su vida, su sentir, y su poesía. El libro lo recomiendo ampliamente para aquellos que les interesa la poesía pero no se animan a abrir un libro y leer, o tomar alguna hoja de papel y escribir, así, sin más, sin licenciaturas, sin manuales de poesía; qué cosas tan horrorosas.

El libro está entre muchas obras más de Krauze; una de las mejores escritoras mexicanas hoy en día, si te interesa este libro y vives en México, es distribución gratuita para educación media, es decir, secundaria, seguramente con suerte te prestarán alguna copia a pesar de que no estudies ahí; el libro fue elegido en 1994 para formar parte de esta colección, con 52 000 copias por todo el país debe haber alguna esperándote en el estante de esa escuela, de esa librería, sal a buscarlo, que la poesía te espera.

By ellocoenelrincon

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